Jaime I, Rey de Aragón desde 1213 hasta 1276, conocido como "El Conquistador", hijo de Pedro II de Aragón y María de Montpellier.
Fue capaz de aglutinar bajo su corona gran parte de la zona mediterránea española conquistando Mallorca, Menorca, Ibiza, Formentera y Valencia arrebatándoselas a los almohades; y Murcia tras intensas disputas con la Corona de Castilla y los Nazaríes de Granada. Fundó los reinos de Mallorca y Valencia forjando así en estos sitios una seña de identidad propia que aun persisten en nuestros días, como en la cultura, religión, idioma...
Durante su reinado siempre fue justo y parcial para todos sus territorios, otorgando fueros propios a los nuevos reinos que fundaba y dándoles más poder a las Cortes y Ayuntamientos,también promulgó el derecho romano para todos los habitantes. Impulsó el comercio marino por todo el mediterráneo, especialemnte con el norte de África.
Siempre se sintió un defensor de "España", conociendose este término como los reinos que pueblan la península Ibérica (Castilla y Aragón). Siempre pidió colaboración de las gentes de Cataluña y de Aragón, primero para defender los intereses de su hija, doña Violante (Reina consorte de Castilla, casada con Alfonso X) y de sus nietos y al mismo tiempo para "salvar España": {porque si el rey moro de Granada puede con el rey de Castilla, la tierra de España de las tierras de Aragón y Cataluña también pueden peligrar} decía.
Jaime I estuvo presente en el II Concilio de Lyon de la Iglesia Católica, que se celebró en la catedral de Lyon en 1274.El concilio deliberó sobre la preparación de una nueva cruzada centrándose en los aspectos financieros de la misma, para lo cual se decidió que durante seis años un diezmo de todos los beneficios de la cristiandad deberían destinarse a la cruzada. Jaime I se mostró partidario de iniciarla inmediatamente pero al oponerse los Templarios no se tomó ninguna decisión. Ante las indecisiones de los demás asistentes a la asamblea canónica, Jaime I se despidió del Santo Padre, abandonó la reunión con los miembros de su séquito y les dijo: "Barones, ya podemos marcharnos: hoy a lo menos hemos dejado bien puesto el honor de España".
Éste monarca hispano de indudable valor, con gran capacidad estratégica en el campo de batalla y con enorme destreza a la hora de encabezar las decisiones más importantes que hubo que tomar durante su reinado. Rey de Aragón, Rey de Valencia, Rey de Mallorca, Conde de Barcelona, Señor de Montpellier, entre otros muchos títulos, es considerado a día de hoy como uno de los padres de nuestra patria, siempre al servicio de Dios y de España.
Fue capaz de aglutinar bajo su corona gran parte de la zona mediterránea española conquistando Mallorca, Menorca, Ibiza, Formentera y Valencia arrebatándoselas a los almohades; y Murcia tras intensas disputas con la Corona de Castilla y los Nazaríes de Granada. Fundó los reinos de Mallorca y Valencia forjando así en estos sitios una seña de identidad propia que aun persisten en nuestros días, como en la cultura, religión, idioma...
Durante su reinado siempre fue justo y parcial para todos sus territorios, otorgando fueros propios a los nuevos reinos que fundaba y dándoles más poder a las Cortes y Ayuntamientos,también promulgó el derecho romano para todos los habitantes. Impulsó el comercio marino por todo el mediterráneo, especialemnte con el norte de África.
Siempre se sintió un defensor de "España", conociendose este término como los reinos que pueblan la península Ibérica (Castilla y Aragón). Siempre pidió colaboración de las gentes de Cataluña y de Aragón, primero para defender los intereses de su hija, doña Violante (Reina consorte de Castilla, casada con Alfonso X) y de sus nietos y al mismo tiempo para "salvar España": {porque si el rey moro de Granada puede con el rey de Castilla, la tierra de España de las tierras de Aragón y Cataluña también pueden peligrar} decía.
Jaime I estuvo presente en el II Concilio de Lyon de la Iglesia Católica, que se celebró en la catedral de Lyon en 1274.El concilio deliberó sobre la preparación de una nueva cruzada centrándose en los aspectos financieros de la misma, para lo cual se decidió que durante seis años un diezmo de todos los beneficios de la cristiandad deberían destinarse a la cruzada. Jaime I se mostró partidario de iniciarla inmediatamente pero al oponerse los Templarios no se tomó ninguna decisión. Ante las indecisiones de los demás asistentes a la asamblea canónica, Jaime I se despidió del Santo Padre, abandonó la reunión con los miembros de su séquito y les dijo: "Barones, ya podemos marcharnos: hoy a lo menos hemos dejado bien puesto el honor de España".
Éste monarca hispano de indudable valor, con gran capacidad estratégica en el campo de batalla y con enorme destreza a la hora de encabezar las decisiones más importantes que hubo que tomar durante su reinado. Rey de Aragón, Rey de Valencia, Rey de Mallorca, Conde de Barcelona, Señor de Montpellier, entre otros muchos títulos, es considerado a día de hoy como uno de los padres de nuestra patria, siempre al servicio de Dios y de España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario