domingo, 31 de marzo de 2013

EN RUMBO DE COLISIÓN...Jo




6 de junio de 1995. Aeropuerto internacional de Manchester. Fue la más espectacular oleada de avistamientos OVNI de la historia británica. Investigadores civiles y oficiales siguen de cerca todas las novedades. No hay día durante el cual no tenga lugar un avistamiento. En total se registran 2600 casos, es decir, aproximadamente tres cada jornada. Sin embargo, casi ninguno de ellos es tan espectacular e interesante como el que desencadena el comienzo de la oleada. Un suceso que cuenta con todos los ingredientes necesarios para pasar a la posteridad y cuya investigación llevó a los estudiosos a sorprendentes conclusiones.
Las 6.55 de la mañana. A esa hora, los controladores del aeropuerto tenían prevista la llegada del vuelo regular que una esta ciudad con la italiana de Milán. El vuelo se llevaba a cabo con toda normalidad hasta ese momento en un Boeing 737 a bordo del cual viajaban más de cien pasajeros.
Menos de media hora antes, los operadores de la torre de control habían iniciado el trabajo en colaboración con la tripulación del vuelo. El objetivo era que el descenso y aproximación a pista discurriera sin contratiempo de ningún tipo. Acompañaba el cielo, que se presentaba despejado, tanto de nubes como de tráfico aéreo. Sin embargo, cuando los relojes marcaban las 6.48 horas sucedió algo inquietante.
Sin saber cómo, el piloto del vuelo descubrió que a pocos cientos de metros frente a él se encontraba un intruso aéreo que describió como un artefacto en forma de cuña, iluminado con pequeñas luces “como las de un árbol de navidad”. Y lo inquietante no es que se encontrara frente a él, sino que se movía, y que lo hacía a rumbo de colisión con el Boeing 737.
Raudo, el piloto decidió tomar los mandos y modificar bruscamente la ruta. Afortunadamente, fue rápido, y el extraño artefacto pasó pro encima del avión comercial sin efectuar el más mínimo movimiento para intentar evitar la colisión, que no se produjo únicamente gracias al comandante del avión, que dio parte de los hechos, tras aterrizar, en el pertinente informe oficial, que fue el primero de estas características que se efectuó durante la gran oleada británica.
La investigación oficial del caso corrió a cargo de la Aviación Civil del Reino Unido. A la par, un departamento oficial de la sección segunda del Estado Mayor del Ejército supervisó todos los datos. Al frente de este equipo se encontraba un alto funcionario llamado Nick Pope, cuya única dedicación era investigar oficialmente el fenómeno OVNI. Lo primero que se descubre durante la investigación fue que desde tierra el fenómeno también fue observado. Así lo aseguró a las autoridades un joven llamado Mark Lloyd, quien explicó que el triangulo negro rodeado de luces era tan grande como un estadio de fútbol. Su descripción coincidía con la efectuada por los tripulantes del Boeing. Los datos, por supuesto, pasaron a formar parte del informe oficial gestado por el investigador Nick Pope.
Los investigadores oficiales no, pero los civiles comenzaron a valorar la posibilidad de que el vuelo se hubiera cruzado en el aire con alguna clase de prototipo militar desconocido. Sin embargo, y pese al aspecto del artefacto, en este caso parece que dicha posibilidad no tiene asilo. Ciertamente, muchos de los casos ocurridos durante los tres años de oleada podrían justificarse con esa posibilidad, pero el que en concreto nos ocupa, no. Finalmente, los investigadores de Aviación Civil decidieron dar a conocer el informe del suceso justo un año después. Se trataba de un proceso de apertura informativa sin precedentes.
En el informe de Aviación Civil se ofrecieron todos los datos del encuentro. Los investigadores que han estudiado el caso llegaron a la conclusión de que no existía explicación para el suceso. Pese a ello, consideraron que se trató de un artefacto real, con capacidad para volar y aparentemente dotado de tecnología. Es por ello que decidieron incluir el caso entre los informes de nearmiss, un listado oficial de acontecimientos en los cuales se registran los incidentes aéreos ocurridos en el cielo con riesgo de colisión. De los veintisiete casos de aquel año, todos los episodios corresponden a aviones que se aproximan demasiado en sus rutas. Todos menos uno: el informe del que nos ocupa, en el que se determinó que existió un grave riesgo de colisión.
Otros ejemplos de supuestos ovnis triangulares
Además, los investigadores civiles también elaboraron sus expedientes. Uno de ellos fue el físico termonuclear Clive Saunders, de la Universidad de Manchester, que estudió todos los extremos del suceso y sus testimonios. En su informe final aseguró lo siguiente: “La tecnología nuclear necesaria para hacer volar así a un objeto de ese tamaño y características sólo estará en poder de la ciencia dentro de ciento cincuenta años”. Habida cuenta de este dato, es difícil creer que se tratara de un prototipo secreto… Y más cuando estas observaciones se repitieron durante los siguientes meses de forma pertinente y con una serie de características que son realmente identificativas de los episodios de este estilo.

FUENTE: TEJIENDO EL MUNDO

ANIMALES DENTRO DE PIEDRAS....Jo



Animales petrificadosRecientes investigaciones han revelado la existencia de algunos casos sobre, sapos, ranas, y otros animales pequeños petrificados en rocas sólidas, en otros casos han sido encontrados dentro de los troncos de árboles y otros lugares de imposible acceso.
Casos Documentados
En 1761, el doctor del Rey Henry III de Francia, encontró en la aldea de Meudon una gran rana en un bloque de piedra que un obrero había estado rompiendo. La rana estaba en perfecto estado, llena de vida, sin embargo en la piedra no había un orificio que permitiese al animal entrar a la piedra. El obrero dijo que no era la primera vez que se encontraba con un animal dentro de rocas.
En 1865, se encontró una rana en una piedra caliza, cuando unos excavadores trabajaban en un bloque de piedra caliza de magnesio, el cual fue obtenido a 25 pies cerca de la localidad de Hartlepool, Inglaterra. Donde se descubrió una cavidad dentro la piedra, la cual contenía un pequeño sapo vivo, el agujero no era más grande que el cuerpo del renacuajo, sus ojos brillaban extrañamente. Cuando el animal fue encontrado este trataba de iniciar su proceso respiratorio, pero tenía dificultad para hacerlo.
La rana terminó en posesión del señor S. Horner, el presidente de la Sociedad de Historia Natural, tras ser examinado se descubrió que el sonido que emitía surgía de su nariz, debido a que su boca estaba completamente cerrada. Las garras de sus patas delanteras estaban hacia adentro y sus patas traseras tenían una gran longitud. La rana tenía una tonalidad pálida que no era distinguible de la piedra, posteriormente cambió a un marrón oliva.
En esa misma época se publicó el relato de un minero de plata llamado Moses Gaines encontró un sapo dentro de una roca de unos 60 centímetros de diámetro. El sapo medía casi ocho centímetros de largo y era muy gordo, sus ojos eran del tamaño de centavos. Ese ejemplar era mucho más grande que los sapos de su especie. El animal parecía estar aletargado y no respondía a los golpes de sus captores para forzarlo a saltar.
Una lagartija revivió en 1821, cuando David Virtue, un obrero trabajaba con un gran pedazo de piedra que consiguieron en una excavación a casi siete metros bajo la superficie. Mientras golpeaba la piedra encontró una lagartija incrustada en la piedra. Estaba enrollada en una cavidad redonda con su propia forma. El reptil medía poco más de un pie, su piel era de color café amarillento y tenía una cabeza redonda con brillantes ojos. Aparentemente estaba muerto, pero después de ser expuesto por cinco minutos al aire y el sol, mostró señales de vida y salió corrió con mucha celeridad.
Durante la Segunda Guerra Mundial, un soldado británico trabajaba con un grupo encargado de hacer caminos con piedras y llenando cráteres de bombas. Ocasionalmente usaban explosivos para abrir piedras, pero tras una detonación el soldado movió un pedazo de roca y encontró una rana grande, junto a ésta había una lagartija de 22 centímetros pies de largo. Ambos animales estaban vivos, pero lo más sorprendente era que la cavidad donde las descubrió estaba a 7 metros bajo la superficie.
La Academia Científica de Francia publicó un relato de 1719, el texto relataba como en el centro exacto del tronco de un olmo, a metro y medio por encima de la raíz, se encontró una rana viva, de tamaño mediano que llenaba un hueco vacante del tronco.

Renacuajo se transforma en rana.
La revista Uitenhage Times de Sudáfrica imprimió en 1876 una edición que relataba cómo dos leñadores que cortaban planchas de un árbol encontraron un hueco profundo que contenía 68 sapos pequeños, cada uno tenía el tamaño de una uva. Su color era café claro casi amarillo y estaban en perfecto estado, saltando como si nada les hubiese pasado. El espacio fue examinado pero no había indicaciones de cómo habían sobrevivido allí sin agua, comida y aire.
Incluso aun hay casos más extraños, como la rana que fue encontrada mientras demolían una pared de yeso de un castillo en septiembre de 1770. La rana estaba viva y la pared fue hecha hace 40 años.

Rana fosilizada preservada en ambar que se mantiene incorrupta por miles de años
El reconocido biólogo Julian Huxley recibió una carta de una compañía de gas en Devonshire, Inglaterra. El texto decía que mientras rompieron una pared de cemento para colocar unas extensiones de tuberías, uno de los obreros descubrió lo que parecía la pata de una rana y pronto encontraron 23 ranas, las cuales fueron liberadas en un jardín de flores y estas se fueron saltando.
En 1976, un equipo de construcción de Fort Worth, Texas rompía paredes de cemento que había levantado el año anterior. Entre los escombros encontraron un espacio de aire donde había una tortuga viva, el espacio que ocupaba tenía la silueta del animal. Sin embargo, la tortuga falleció pocos días después de haber sido liberada.
Resulta poco comprensible como animales o huevos de animales pudieron desarrollarse en ese ambiente. Los geólogos revelan que las piedras se forman en miles de años, ¿cuán viejos son estos animales?
Posible explicación científica
Existen rocas calizas con abundantes porosidades por las que fluye el agua bajo tierra. Como por todos es sabido las ranas antes de convertirse en los simpáticos anfibios saltarines que todos conocemos pasan por un estado "larvario", los renacuajos, que tienen habitualmente un tamaño bastante menor al de los especímenes adultos.

Estos dos factores podrían dar el caso de que un renacuajo quedara atrapado dentro de una de esas porosidades o cavidades que posteriormente fuera taponada por algún tipo de residuo y compactado por algún tipo de presión. De este modo se podría encontrar un renacuajo en el interior de una piedra que parece totalmente sellada. El renacuajo podría desarrollar la última fase de su evolución en el interior. Esta teoría requiere diversos factores como una alta humedad, un suministro de alimento para el renacuajo que hacen muy complicado que se de de forma habitual.

Por otra parte también se puede dar el caso de que animales queden atrapados en una zona de sedimentos que posteriormente se compactan formando una roca. Por supuesto este proceso requiere de (normalmente) cientos de años, por lo que el animal de su interior moriría momíficado o en algunos casos fosilizado en su interior. Los rumores, las leyendas y demás harían el trabajo restante dándole vida a animales que llevarían años muertos.

EL DESASTRE DEL WILHEM GUSTLOFF....Jo




El 12 de abril de 2012 se conmemoró el centenario del naufragio del Titanic y todos los medios del mundo le dedicaron un emo tivo recuerdo. Las peculiares circunstancias de su hundimiento han convertido al Titanic en un mito inolvidable. De hecho, si las catástrofes tuvieran categorías, la del célebre transatlántico de la naviera White Star sería el punto de referencia de los dramas imborrables. Es un hecho. El Titanic ocupa la cúspide de la particular mitomanía que generan las tragedias en el mar y es frecuente suponer que su hundimiento constituye la mayor tragedia marítima de la historia. Pero no es así, ni de lejos. 

Si el interés mediático por la pérdida de un barco se basara sólo en el número de muertes, el Titanic dejaría su puesto de honor en la memoria colectiva para dar paso, abrumado, al buque alemán Wilhelm Gustloff, que se alzaría indiscutible a la cima de los desastres en el mar. Así lo acreditan los casi 10.000 muertos en esa calamidad producida por el impacto de tres torpedos soviéticos disparados cuandola II Guerra Mundial tocaba a su fin y el mismo día que Hitler se dirigió a los alemanes por última vez. En contraste con el bullicio histórico que rodea al Titanic, detrás del Wilhelm Gustloff sobrecoge el silencio de las víctimas alemanas anónimas, sacrificadas por la guerra en las gélidas aguas del mar Báltico. Se trata de las muertes habidas en el curso de una serie de matanzas sucesivas, acaecidas en el contexto bélico de la denominado operación Aníbal, nombre clave del operativo ordenado por el almirante Karl Dönitz para la evacuación de Prusia Oriental y del corredor polaco de los dos millones a dos millones y medio de alemanes que en 1945 huían aterrados del avance de los ejércitos de Stalin. 





El Wilhelm Gustloff era un lujoso crucero civil diseñado para viajes de placer, pensado para albergar a 1.880 personas entre tripulantes y pasajeros. En sus travesías en tiempo de paz pasó por España, pero en 1936, al comienzo de la guerra civil española, trajo hasta aquí parte dela Legión Cóndor y material bélico para los nacionales. Apenas tres años después, en los prolegómenos de la Segunda GuerraMundial, fue reconvertido en buque hospital. Hizo este trabajo en las campañas de Polonia y Noruega para luego dirigirse a la mayor bahía del Báltico, en Szczecin, Polonia, (Stettin en alemán). Allí lo convertirían en residencia de entrenamiento de la gran base germana de instrucción de guerra antisubmarina ubicada en aquel lugar. 

Le añadieron unas ametralladoras antiaéreas sin que ese detalle lo convirtiera en un barco de guerra. Y así pasó su tiempo, con más pena que gloria, hasta enero de 1945, cuando a los alemanes les llegó la hora de abandonar el frente del este empujados a sangre y fuego por el avance soviético. Todos los buques germanos disponibles en el Báltico, mil cien contando botes y pesqueros, fueron destinados a la evacuación. Entre los barcos de mayor desplazamiento se encontraba el Wilhelm Gustloff, que fondearon en el puerto de Gotenhafen, hoy Gdynia (Polonia), a unos30 kilómetros al norte de Gdansk, una zona que había sido ocupada porla Wehrmacht en 1939. Las crónicas hablan de decenas de miles de refugiados agolpados junto al puerto en busca de un barco en el que huir hacia Kiel. El desorden era tan tumultuoso que sólo algunos disparos al aire parecían calmar la situación unos minutos, pero luego vencían de nuevo el miedo y un caos que explica por qué las cifras que se barajan sobre personas embarcadas en cualquiera de aquellos barcos son forzosamente aproximadas. Un testigo afirma que la mañana del 30 de enero, cuando habían embarcado unos 3.000 pasajeros, dejaron de contar. De este modo en el Wilhelm Gustloff se agolparon casi 11.000 personas. No había cubierta, camarote, pasillo o bodega practicable sin ocupar. Y esta vez los pasajeros no eran veraneantes disfrutando del placer de navegar por cálidas aguas. Esta vez embarcaron el miedo, el frío y la muerte. Heinz Schön, sobrecargo del barco y principal estudioso del suceso, calcula que a bordo iban 173 tripulantes, 918 oficiales, suboficiales y marinos de una división de guerra antisubmarina, 373 mujeres del Cuerpo Femenino Auxiliar dela Kriegsmarine, 162 soldados heridos, 8.956 civiles, de los que se estiman que 4.000 eran niños. 




En total, 10.582 personas a bordo, de las que fallecerían 9.343, cifra que deja unos 1.200 supervivientes. Pero la verdad, nadie pudo contar con rigor a todos los que embarcaron. En esas condiciones y con los submarinos soviéticos al acecho, el Wilhelm Gustloff zarpó de Gdynia a las 12.30 horas del mediodía del 30 de enero de 1945 al mando de dos capitanes: Friedrich Petersen, civil, y Wilhelm Zahn, dela Kriegsmarine. El tiempo era malo. Mucho viento, nieve y10ºC bajo cero.


 El barco se hizo a la mar y oscureció. Había luna nueva y hacía frío, mucho frío. La derrota que tomaron fue la decidida por el veterano capitán civil Petersen. Aguas profundas y luces de posición apagadas en busca de la protección de otro convoy armado que suponían navegaba más al norte rumbo a Kiel. Creyeron encontrarlo y encendieron las luces de navegación para evitar un abordaje ante la nula visibilidad. Con esa acción y para su desgracia se pusieron a la vista de periscopio del capitán Alexánder Marinesko, al mando del submarino soviético S-13. Fue la perdición del Gustloff, que en ese instante se encontraba entre la bahía de Danzig y la isla danesa de Bornholm con Stolpmünde (hoy Ustka) por el través. Dieron las nueve de la noche. El S-13 armó cuatro torpedos, cada uno con su lema escrito sobre el casco: “por la madre patria”, “por Stalin”, “por el pueblo soviético” y “por Leningrado”. Disparó tres que hicieron blanco. 





El transporte acusó los impactos y escoró rápidamente a estribor recuperando la verticalidad, pero poco después, volvió a escorar hacia babor. El suboficial Karl Hoffman relató que el primer torpedo hizo blanco en la proa debajo de la línea de flotación; el segundo, en la sección media, a la altura de la piscina, y mató a casi todas las mujeres auxiliares de la Kriegsmarine, y el tercero impactó a mitad del buque por delante de la sala de máquinas. En pocos minutos, el castillo de proa se encontraba casi bajo las aguas. El Gustloff se hundió en menos de 50 minutos llevándose consigo entre 9.200 y 10.000 mujeres, niños y hombres. Sólo 1.239 personas (otras fuentes señalan poco más de 900) pudieron ser rescatadas vivas por los buques alemanes que se encontraban en las cercanías. El mar, relataron los testigos, aparecía como un tenebroso paisaje cubierto de cadáveres con salvavidas. 

SUCESOS EXTRAÑOS EN LA EDITORIAL PLAZA & JANES...Jo



En junio de 1991 durante 72 horas, una fuerza invisible y descontrolada arrasó las oficinas de la empresa Plaza &Janés de Málaga, situada en la calle Cister nº 11. Durante tres días los empleados de dicha oficina pudieron ser testigos de como “algo” o “alguien” empujaba las grandes estanterías y expositores, mesas, cuadros y sillas. Abría y cerraba las puertas de los despachos, movía los archivadores, hacía sonar los teléfonos de forma repetitiva sin causa justificada o encendía y apagaba las luces.


Rafael Ortega jefe de ventas por aquel entonces de Plaza & Janés relataba lo ocurrido al periodista e investigador Julián Contreras Gil: “Pasamos mucho miedo. Cuando los muebles comenzaron a volcarse, salimos corriendo a la calle. Se descolgaban los cuadros y caían las estanterías, como si las empujaran. Incluso los botes donde poníamos los bolígrafos salían volando”.

Hacia las seis de la tarde mientras impartía un curso para nuevos vendedores, Rafael enmudeció de pronto cuando uno de los ceniceros de la sala de juntas, salió despedido hacia el suelo. Al mismo tiempo, las cortinas eran sacudidas violentamente mientras una de las plumas estilográficas que se encontraba sobre la mesa era lanzada contra uno de los tabiques.


Trabajadores de despachos contiguos al de Rafael, salían despavoridos hacia el pasillo al escuchar ruidos en sus despachos así como en la contigua sala de ventas, su nerviosismo se disparó al escuchar el estruendo de un mueble al caer sin que nadie estuviera cerca de él. Ceniceros, grapadoras y lápices salían disparados en todas direcciones. Mientras los trabajadores Diego Barranco y Joaquín García huían presos del pánico, un rollo de cinta adhesiva salía despedido contra ellos a la par que caían los fluorescentes del techo impactando y estallando en el suelo. Nadie sabía que estaba pasando ni a que se estaban enfrentando.


Los empleados reunidos todos en la sala principal de la editorial, vivieron durante horas el ataque de una fuerza invisible que derribaba las altas estanterías repletas de grandes tomos, que desplazaba sillas y mesas y descolgaba cuadros, fotografías y pizarras de forma inteligente. Durante estos ataques, la temperatura descendía alarmentemente según los testigos.


Al día siguiente cuando se reanudó la jornada laboral, los fenómenos volvieron a la oficina de Plaza & Janés. Los cajones de los archivadores se abrían y cerraban y las puertas de los despachos eran empujadas por manos invisibles. En medio de este caos Rafael Ortega decide acudir a la Catedral de Málaga en busca de un sacerdote, el cual mientras rezaba en voz alta iba lanzando agua bendita y poniendo romero por los despachos y pasillos de la oficina. Pero los sucesos continuaron incluso con la presencia del sacerdote, el cual salió como alma que lleva el diablo cuando vio como parte del mobiliario era arrasado por una fuerza invisible.


Rafael decide entonces acudir a la Comisaría de policía más próxima. Los miembros de la Policía Nacional inspeccionaron el lugar, cada sala, cada despacho en busca de una respuesta lógica que no hallaron.


Rafael decide cerrar temporalmente la sede editorial y llamar a Barcelona donde uno de sus jefes al saber lo ocurrido le sugiere que se ponga en contacto con un grupo de investigadores y varios periodistas para que buscaran alguna explicación. 48 horas más tarde los miembros del grupo CICE (Centro de Investigaciones Científicas Especiales) acudían a la Oficina de Plaza & Janés. Según Francisca Moreno, una de los miembros de CICE “Parecía como si por allí hubiera pasado un huracán. Todo el mobiliario estaba volcado(…). En el último despacho había una librería inmensa volcada y todos los libros en el suelo”.

En el despacho de Rafael Ortega, donde todo había comenzado, el grupo CICE encontró grabada en el polvo de la parte superior de una de las estanterías, el contorno de una mano. Una estantería situada a gran altura y con apenas espacio entre ésta y el techo.


El grupo de investigadores dejó tres grabadoras en las que se grabaron tres voces distintas, una en cada grabadora, lo más sorprendente es que en una de ellas llamaban por su nombre a una de las investigadoras del grupo CICE. A otra de las integrantes del grupo mientras recorría los pasillos se le apareció junto a la puerta de uno de los despachos, una figura luminosa invisible para el resto de investigadores. Celeste Torres, la integrante del CICE, le preguntó a la figura que quién era, a lo que ésta respondió: “Miguel. Tal como salí entré”.


Durante los dos días en que tuvieron lugar los fenómenos de Plaza & Janés, a pocos kilómetros de Málaga, en el cementerio de Parcemasa, se exhumaba el cuerpo de un antiguo empleado de la delegación, el profesor de primaria del colegio Gibraljaire, Miguel Domínguez. Miguel Domínguez fue un antiguo compañero de Francisca Moreno investigadora del CICE cuyo nombre se oía en una de las psicofonías, Miguel se había quitado la vida cinco años atrás al haber sido despedido y acusado injustamente de estafa mientras era contable de la empresa.

¿Casualidad que el misma día que se exhuma el cuerpo del antiguo contable de la empresa acusado de estafa injustamente, sea cuando se produzcan los fenómenos inexplicables? ¿Casualidad que fuese antiguo compañero de una de las integrantes del CICE y su nombre saliese en una de la psicofonías? Yo creo que no, ¿Qué creeís vosotros?



Fuentes consultadas: Francisco Contreras Gil “Fantamas, ¿hay alguien al otro lado?”

EL OVNI DE KECKSBURG...Jo



Un objeto se estrello en el pequeño pueblo de Kecksburg, Pensilvania el 9 de diciembre de 1965. Se observó una bola de fuego en el cielo a través de varios estados de EE.UU. y Canadá. Testigos proporcionaron información,corroborando la caída del objeto y su ubicación en el bosque Kecksburg. Decenas de personas, entre los que habia bomberos, periodistas, y civiles que se encontraba en el lugar del accidente, describieron el acordonamiento de la zona por parte del ejercito, y la recuperación de un objeto transportado por un camión.

¿Qué es exactamente lo que paso volando por los cielos de Canadá, Michigan, Ohio, y Pennsylvania en el atardecer del 09 de diciembre 1965? Testigos presenciales describieron el objeto desconocido como una "bola de fuego", pero que parecía estar bajo algún tipo de control inteligente, ya que se desvió un poco en Ohio hacia el estado de Quaker.

Uno de los primeros periodistas que llegaron a la zona de la caída del objeto fue el empleado de la emisora WHJB, John Murphy.

Murphy hizo entrevistas a testigos y también corrió hacia el sitio de la supuesta caída.
Murphy dijo haber visto el objeto, también dijo que le hizo fotos, declaro que días mas tardes cuando preparaba un articulo sobre esa noche recibió la visita de dos funcionarios del gobierno que hablaron a solas con él en un despacho de la emisora,también declaro que le fueron confiscadas las fotos.


foto de la estela dejada por el objeto

























  Pero volvamos al día del incidente,después de acabada la búsqueda por parte de la policía,llegó el ejercito quien acordono la zona (el gobierno negó mas tarde que el ejercito estuviera allí ).


la declaración "oficial"; "La Policía Estatal de Pennsylvania han hecho una búsqueda exhaustiva en el bosque. Y no hemos encontrado nada ”.

¿ si no había nada en el bosque,porque el ejercito acordono la zona?.

La historia de la caída de pronto salio en los periódicos y la televisión, y el área se lleno de gente que quiere obtener información de primera mano sobre lo que podría ser un acontecimiento histórico.

¿Que era lo que se había estrellado en el bosque? ¿Era sólo un meteorito?.¿O los desechos de alguna nave espacial al volver a entrar en la atmósfera de la Tierra? Si la explicación era tan simple, sin embargo, ¿por qué los militares acordonaron el área? ¿Podría haber sido una nave militar secreta?,¿o algo mucho más misterioso?.

Pronto se supo que algunos civiles habían estado en el bosque antes de que el Ejército tomara el control de la zona. Estos pocos individuos fueron entrevistados, y contaron una historia increíble.

Ellos declararon que vieron a un objeto de color bronce. Este artefacto era de unos 3 metros de largo,la forma recordaba a una bellota y llevaba una banda que parecía de oro alrededor de su parte inferior.

Más tarde esa noche, los testigos afirmaron que observaron un camión portando un objeto grande, cubierto por una lona.

La Fuerza Aérea llegó a la conclusión en su investigación con la posterior declaración "oficial" de que un meteorito fue el responsable del informe de un artefacto que brillaba intensamente, y que se estrello en el bosque. 
recreación del incidente de Kecksburg
Los medios de comunicación en su conjunto aceptaron esta explicación, y el asunto parecía cerrado, Si no hubiera sido por un programa de televisión de 1990.
El área de Kecksburg volvería a ser un hervidero de controversia después de una dramatización de los eventos en "Misterios sin resolver". Los ciudadanos de la zona parecía estar divididos entre los que aceptaban la explicación "oficial", y otros que afirmaban que había un "encubrimiento" de los hechos.

Después de que el programa de televisión fuera emitido,un nuevo testigo hizo una declaración, era un oficial de la USAF en la Base Aérea Lockbourne (cerca de Columbus, Ohio). “En las primeras horas del 10 de diciembre, llegó un camión por la puerta trasera poco utilizada de la base y se me ordeno vigilar el vehículo que en su parte trasera tenia una gran lona que cubría un objeto cónico”.

Se me ordeno disparar a cualquiera que intentara acercarse demasiado. Se me comunico que el camión se dirigía a la Base Aérea Wright Patterson. 

 La versión oficial del gobierno de EE.UU. es que no pasó nada esa noche en el Keksburg. No hubo ninguna operación militar, nada choco contra el suelo y, ademas no se recupero nada. Los testigos se equivocaron o se había confundido con otros eventos alrededor del mismo período de tiempo. El gobierno reconoce que una sonda soviética paso por el cielo de lo EE.UU. Pero no coincide ni con la hora ni aterrizó en los EE.UU. Posiblemente la bola de fuego que fue vista y fotografiada era un meteorito que se quemo en la entrada en la atmósfera.

Esto es ciertamente posible, pero hay algunas cosas aquí que parecen indicar que esto podría ser algo más que una coincidencia.

foto aerea del bosque
  Esta foto muestra el bosque después del supuesto aterrizaje o accidente,se vé una linea que cruza el bosque. Por supuesto, esto no prueba nada, ya que también podría ser cualquier número de otras cosas, pero la línea que se ve no estaba presente en las fotos tomadas en años anteriores.















Como era de esperar, las teorías alternativas fueron propuestas por los escépticos, como la reentrada de una sonda del tipo Venus de Rusia.
¿porque muchos piensan que fue un satélite soviético?,hagamos algo de historia y situémonos en el 23 de noviembre de 1965, la Unión Soviética lanzó una sonda a Venus, conocida como el Cosmos-96. El programa espacial soviético tenia la costumbre de cambiar el nombre de cualquier nave que no cumple con su misión, "Cosmos-xx", y por lo tanto la nave espacial que se conoce como el Cosmos-96, fue un fracaso. De haber tenido éxito en lo que a su viaje a Venus se refiere, probablemente habría sido conocida como Venera 4, pero cuando la etapa superior del cohete falló, la nave quedó en la órbita de la tierra y oficialmente se convirtió en "Cosmos-96" y el nombre de "Venera 4" fue reutilizado para la próxima misión.


nave tipo venera



La Cosmos-96 volvió a entrar en la atmósfera en la noche del 09 de diciembre, la misma noche que se informó del objeto que se estrelló en Kecksburg . La sonda entró en la atmósfera terrestre lo que provocó que durante el viaje al sur,la sonda cruzara el cielo de América del Norte. La versión oficial es que la Cosmos-96 no estaba en una trayectoria que le habría permitido estrellarse en Pensilvania. Sin embargo, habría estado muy cerca, si la trayectoria hubiese sido diferente por unos pocos grados.

La cosmos-96 era una nave que a la llegada a venus tenia la intención de soltar una capsula y esto lo sabemos porque las siguientes naves que se mandaron a venus como las anteriores veneras así lo hicieron,(recordemos que si la misión no hubiera fracasado se hubiera llamado Venera-4).Esta cápsula se llena de instrumentos científicos y ha sido diseñada para resistir la entrada en la atmósfera de Venus.

La cápsula no tienen motores que le permita hacer un "aterrizaje suave" pero es probable que tuviera un paracaídas, venus tiene atmósfera y las Veneras utilizaban este sistema para descender. Dado que la cápsula estaba destinada a entrar en la atmósfera de Venus mientras la nave principal seguiría dando vueltas al planeta en una órbita heliocéntrica, la capsula habría sido lanzada de la nave principal con cierta fuerza. Es probable que si las dos partes de la nave espacial se separaban, la cápsula podría haber aterrizado a cierta distancia de la trayectoria de la nave principal. Por otra parte, ya que era una pieza de construcción sólida , y está diseñada para volver a entrar en una atmósfera, es muy probable que la capsula pudiera llegar al suelo.



capsula de la venera 4


























Mucha gente no cree que el Cosmos-96 pudiera haber sido la responsable de lo que “aterrizó” en esa zona, debido a que su trayectoria no pasaba por Kecksburg.
El Jefe científico de la NASA sobre desechos espaciales, el Dr. Nicholas L. Johnson, declaró en 2003:


“Les puedo decir categóricamente que no hay manera de que los residuos de la Cosmos 96 hubiesen podido aterrizar en Pennsylvania o en cualquier lugar de los alrededores sobre las 4:45 pm”. Sin embargo, el Dr. Nicholas L. Johnson, y otros que han analizado la trayectoria de la cosmo-96,no han considerado la posibilidad de que parte de la nave pudo haber sido expulsada de la otra, con suficiente fuerza para modificar su trayectoria. 


CONCLUSION:


La línea oficial del gobierno de EE.UU. siempre ha sido que no se estrelló nada en Kecksburg. Sin embargo, hay cosas inusuales y sospechosas en esta historia. Por un lado, existe una notoria ausencia de cualquier documento relacionada con el evento. Es evidente que los residentes creen que algo había caído y lo contaron, y aunque no hubiera habido nada, debería haber habido algún tipo de investigación.


En 2005, hubo una declaración sorprendente de un portavoz de la NASA. La NASA admitía que había ayudado a la Fuerza Aérea en el análisis de piezas procedente de la recuperación de un "satélite Ruso". Después de haber sido preguntado por un reportero, la NASA publicó algunos documentos de la época, que parecía confirmar que se recuperó una nave espacial soviética . A pesar de la admisión de la NASA, la Fuerza Aérea no se ha pronunciado y sostiene que no había ningún objeto y ni documentos relativos a un objeto.

Es lógico que el gobierno de los EE.UU. preferirían no admitir la recuperación de una sonda espacial soviética. El principal motivo en aquel momento seria la Guerra Fría y el hecho de que el gobierno de EE.UU no quiere que los soviéticos supieran lo que se sabía de ellos y sus capacidades técnicas. Por último, está las cuestiones
internacionales. Si una pieza de una nave espacial soviética cayó en los EE.UU. y se recuperó, la caída en si, fue un accidente,la Unión Soviética podría reclamar las piezas encontradas porque legítimamente son de su propiedad. Habría sido responsabilidad de los EE.UU. devolver el objeto a la Unión Soviética, como fue el caso cuando la Unión Soviética recuperó una cápsula espacial de los EE.UU. en 1969. Incluso hoy en día, admitir que se recupero la nave podría causar un incidente internacional menor.
Posiblemente tardemos todavía mucho en saber que cayó en Keksburg,pero hasta el gobierno reconoce que algo pasó,aunque no nos digan la verdad de lo que se llevaron. El gobierno de EE.UU actuó como uno espera que lo hiciera,acordono la zona,confisco cualquier prueba,hablo con los testigos,se llevo el objeto y lo negó todo.



GÁLVEZ; UN HÉROE ESPAÑOL...Jo

Gálvez: el marino español que se aventuró «solo» contra las defensas inglesas de Florida

Tropas españolas cargan contra los ingleses en el fuerte del «Rey Jorge»


EE.UU vivió en Pensacola una batalla decisiva para su independencia. Y, fíjense por donde, aquella lid de 1781 fue librada y ganada por la Infantería de Marina de la siempre olvidadiza España. Una vez más las casacas rojas de la Pérfida Albión se cruzaban en el rumbo de nuestra Historia. Esa vez, al inglés le tocó perder.
El de Pensacola, en tierras de la Florida occidental, fue undesembarco audaz y osado dada la dificultad de acceder a su bahía. Una empresa temeraria que, exitosa finalmente, alumbraría para siempre el arrojo (cojones, que se dice ahora) de uno de los personajes más influyentes y desconocidos de la Historia común de España y de EE.UU: Bernardo de Gálvez Gallardo Madrid, vizconde de Galvestón y conde de Gálvez. Tras aquel fuego de Pensacola su escudo de armas siempre luciría el lema de «Yo Solo», porque así fue cómo entró en el bastión inglés de la Florida: «El que tenga honor y valor que me siga».
«Para entender el desembarco de Pensacola, antes debemos remontarnos a la Guerra de los Siete Años (1756-1763), ganada por el Reino Unido a una coalición de naciones entre las que se encontraba Francia y España», relata José María Moreno Martínjefe de la sección de Cartografía del Museo Naval, que este mes exhibe como «pieza destacada» un mapa en ocho viñetas sobre la batalla de Pensacola.
Tras esa guerra, la España de Carlos III y la Francia de Luis XV, y después Luis XVI, aguardaban avizor una primera oportunidad para devolver el golpe a Inglaterra. Y esa vino con la sublevación de las Trece Colonias (1775) que para sufragar las guerras de la metrópli veían cómo sus cargas impositivas aumentaban sin cesar. La gota que colmó el vaso fue el nuevo impuesto del té, que originó un motín en Boston.

España desde el primer momento ayudó económicamente a los rebeldes norteamericanos llegando a pertrechar a 30.000 rebeldes con sus uniformes, fusiles y 216 cañones, pero... ¿debía intervenir militarmente como hizo posteriormente la Francia de Luis XVI tras la insistencia de Benjamin Franklin? He ahí el dilema del Rey Carlos III. «España se encontraba en una posición más delicada. Por un lado nos encontramos con las tesis del Conde de Floridablanca, que abogaba por mantenerse neutral so pena de desencadenar un efecto dominó de independencias en las colonias españolas americanas. Por otro lado, el Conde de Aranda, embajador de España en París, veía en el apoyo a las Trece Colonias una oportunidad idónea para recuperar Gibraltar», explica Moreno Martín.
Definitivamente se impusieron las tesis del Conde de Aranda yen 1779 España declaró la guerra a Gran Bretaña. Ya nada sería igual en la Guerra de Independencia de las Trece Colonias: Inglaterra se vería obligada a dividir esfuerzos en el Canal de la Mancha (contra Francia), el Mediterráneo(contra España) y el Golfo de México, donde Inglaterra había arrebatado años antes a España algunas plazas marítimas como era el caso de Pensacola, también conocida como San Carlos de Panzacola. Conclusión: las fuerzas de la guerra por la Independencia de las Trece Colonias se niveló. Por un lado,Reino Unido (120 navíos y 100 fragatas) y, por el otro, Francia (60 navíos y 60 fragatas) y España (60 navíos y 30 fragatas).
Es aquí donde saldrá a relucir el ingenio del entonces gobernador de la Luisiana, el malagueño Bernardo de Gálvez (Macharaviaya, 1746 - Tacubaya, en Ciudad de México,1786) quien comenzó a forjar su leyenda militar como capitán en tierras de Nueva España, llevando a cabo una campaña contra los indios Apaches. Con 24 añitos y heridas a doquier, el futuro «Yo Solo», ameritaba ya el galón de comandante de armas de Nueva Vizcaya y Sonora(aproximadamente el actual estado de Nuevo México). El héroe militar español en tierras del ahora EE.UU. forjaba su leyenda, aunque antes regresaría a España para participar en la fallida expedición de Argel (1775), foco central de la piratería en el Mediterráneo.
En su vuelta a América en 1776 Bernardo de Gálvez es destinado a la plaza de Luisiana. Y es por eso que cuando España decide librar batalla a Inglaterra en el Golfo de México todas las venturas se dirigen hacia él. Fijó como objetivo recuperar Pensacola; antes caerían las posesiones británicas de Manchac y Baton Rouge -en la desembocadura del río Mississipi- o Mobila (1779). El círculo se estrechaba así en torno a la capital de la Florida. Sin embargo, su disposición geográfica y su estrecho con escasa profundidad impedía acometer la empresa.
«Se trataba de una operación bastante complicada, por no decir inverosímil», destaca el jefe de cartógrafos. Un 28 de febrero de 1781 partía desde La Habana la expedición española con 36 buques de guerra con José Calvo Irazábalcomo de jefe de la escuadra. En sus tripas los ansiosos infantes de Marina aguardaban el desembarco. Por tierras otras tropas españolas y después francesas esperaban el desembarco para envolver la plaza de Pensacola.
En este momento nos dirigimos de nuevo al Museo Naval de Madrid. En el mapa de 8 viñetas que se exhibirá durante dos meses más como «la pieza detallada» (encargado a raíz del informe de la toma de Pensacola «con la clara intención de narrar la historia de una batalla») observamos en su parte central a los navíos españoles frente al escenario de la batalla. La ciudad de Pensacola en su bahía y la isla de Santa Rosa en la bocana de acceso, formando un estrecho con la posición fortificada de Barrancas Coloradas, desde donde provenía el principal riesgo de la empresa.
Gálvez: el marino español que se aventuró «solo» contra las defensas inglesas de Florida
ARCHIVO DEL MUSEO NAVAL-MAPA PENSACOLA

La toma de la isla de Santa Rosa


El trabajo se auguraba duro, ya que, para llegar hasta su objetivo, la escuadra tenía que pasar a través de un estrecho flanqueado por dos baterías de cañones. Una sentencia de muerte sin duda. Por ello, Bernardo de Gálvez se decidió a tomar el fuerte de la isla de Santa Rosa para así evitar ser aniquilados por un fuego cruzado.
Con valentía, las tropas del malagueño desembarcan en el terreno dispuestas a derramar sangre inglesa pero, para su sorpresa, la fortaleza estaba desmantelada.«Consiguieron tomar la isla sin ninguna baja y sin ningún disparo», sentencia Moreno Martín. La moral aumentó pues, para entrar hacia la bahía de Pensacola, ya sólo tenían que pasar a través de la batería de las Barrancas Coloradas.

«Yo solo»


«Una vez conseguido esto, lo que pretendía Bernardo de Gálvez es pasar con toda la escuadra, eso sí, lo más cerca posible de la isla (ya española) para evitar el fuego de las Barrancas Coloradas», afirma el jefe de la sección de Cartografía. La empresa comenzaba a tomar forma, pero, al aventurarse por el estrecho, el fondo del casco del navío en el que viajaban el malagueño y Calvo (el San Genaro), tocó en el suelo: tenía demasiado calado para pasar. Por ello, fue necesario salir a aguas más profundas para no quedar encallados.
En ese momento comenzaron las discrepancias pues, mientrasGálvez quería entrar en la bahía y tomar Pensacola,José Calvo (al mando de la escuadra), se negaba en rotundo a atravesar el estrecho. Y es que argumentaban, no sin razón, que no se conocía bien el terreno y que una peligrosa tormenta tropical se aproximaba hacia el lugar. Además, la batería situada en el fuerte de las Barrancas Coloradas seguía activa y, en el caso de que un navío quedara encallado, toda la escuadra podría sufrir su fuego y ser seriamente dañada.

Para Gálvez, en cambio, no había opción. El marino subió a bordo de un bergantín llamado «Gálveztown» (un barco con menor calado que el «San Genaro») y se dispuso a llevar a cabo una de las mayores heroicidades de la Historia española: entrar sólo en la bahía pasando a través del fuego enemigo. Sus últimas palabras quedarían grabadas en la historia: «Una bala de a treinta y dos recogida en el campamento, que conduzco y presento, es de las que reparte el Fuerte de la entrada. El que tenga honor y valor que me siga. Yo voy por delante con el Galvez-town para quitarle el miedo».
No había vuelta atrás, Gálvez enarboló la bandera de Comandante y entró en el puerto junto dos pequeñas cañoneras y un buque de transporte. En contra de lo que se puede pensar, no sufrió serios daños por parte de las baterías enemigas y, además, atrajo el fuego sobre sus barcos. «De aquí es donde viene la leyenda que se puede leer en su escudo de armas: ‘Yo Solo’, porque pasó sin que le siguiera en principio ningún comandante», explica Moreno. «Después pasó toda la escuadra, ya que había buques que hacían frente al fuego de las Barrancas Coloradas y podían atravesar la zona con seguridad» determina el experto.

La marcha de Calvo y la llegada de refuerzos

Tras la entrada en la bahía de Gálvez, el resto de buques se decidieron a seguirle. ¿Todos? No. Hubo uno que se retiró, y es, según fuentes históricas, el navío en el que se encontraba José Calvo. Al parecer, el oficial decidió volver a La Habana tras ver el éxito del malagueño. Definitivamente, su misión había acabado, como más tarde le haría saber Gálvez mediante una misiva.
Antes de llegar a su destino, sin embargo, se detuvo en Matanzas (Cuba) donde preparó minuciosamente su defensa ante las posibles acusaciones que sufriera al llegar a territorio español. ¿Se apoderó la vergüenza de él?, probablemente, peronunca se supo a ciencia cierta. Lo que es cierto es que, al partir, dejó a la flota española sin su navío, un gran activo en la contienda.

Tras el ataque inicial, y como estaba planeado, una fuerza terrestre española tomó posiciones para ayudar a asediar Pensacola. Pero esos no serían los únicos refuerzos que recibiría Gálvez. «Ese mes llegó una nueva escuadra de navíos, en un principio se pensaban que era enemiga y que venía a ayudar a los sitiados en Pensacola, pero descubrieron que eranespañoles comandados por José Solano y Bote que acudían a socorrer a Gálvez», destaca Moreno. Con esta flota eran ya casi8.000 los hombres preparados para iniciar el asedio en contra de los 3.000 ingleses.
Además, a los asaltantes también se les unieron cuatro fragatas francesas con casi 800 soldados. Y es que, Francia quería aportar también en esta batalla su pequeño granito de arena (o de pólvora), para favorecer la expulsión de Florida de los ingleses y, por lo tanto, luchar a favor de la independencia de los colonos.

La caída de Pensacola


Tras la entrada en la bahía, todo dependía ahora de las fuerzas terrestres, comandadas por José de Ezpeleta. Este, tenía órdenes de tomar los tres fuertes que defendían Pensacola: el de la «Media Luna», el del «Sombrero» y el del «Rey Jorge». «El siguiente episodio se produjo cuando las fuerzas españolas consiguieron tomar la fortaleza de la Media Luna,donde murieron 52 británicos», explica el jefe de Cartografía.
«A partir de ahí consiguieron pasar a la del Sombrero, luego a la del Rey Jorge y asaltar por detrás la ciudad», finaliza Moreno. La misión tocó a su fin, pues en menos de diez días Pensacola se rindió a los españoles. Las Barrancas Coloradas fueron las siguientes en abandonar la defensa, y es que, tras la caída de la ciudad, poco tenían que hacer ante el arrojo de Gálvez.

Una tormenta imperfecta


Una vez finalizada la contienda un nuevo enemigo se asomó entre las nubes: un huracán que causó grandes problemas a los españoles entre el 5 y el 6 de mayo de 1781, como bien puede apreciarse en una de las últimas viñetas del mapa. «Se puede ver como el autor dibuja una mar rizada y los barcos inclinados con sensación de movimiento», sentencia el experto. Sin embargo, no hubo que lamentar grandes daños, ya que los buques se retiraron de la costa y acudieron a proteger la entrada de la bahía frente a posibles refuerzos ingleses.
Gálvez: el marino español que se aventuró «solo» contra las defensas inglesas de Florida
Bernardo de Gálvez
A pesar de las pocas bajas que sufrieron los dos bandos durante esta contienda (74 españolas por 145 inglesas), sin duda la de Pensacola fue una de las batallas que favoreció la independencia de los EE.UU. Y es que, gracias a la toma de la ciudad, se abrió otro frente para los ingleses, que se vieron obligados a destinar soldados a las inmediaciones de la zona descuidando en cierta manera la lucha contra los colonos.
La hazaña le valdría a José Solano y Bote el título de «Marqués del Socorro» por la ayuda prestada. A su vez, Gálvez recibiría gracias a la toma de Pensacola el nombramiento de mariscal de campo, además de un título que no le abandonaría jamás… «Yo solo».
En la España descafeinada de hoy, apenas nadie recuerda aquellos avatares acaecidos en la Florida a fines del siglo XVIII. Si preguntáramos en un instituto, Universidad o redacción de periódico (sí, también) qué es Pensacola nos sorprenderíamos con la respuesta. Eso será en España, porque en EE.UU. aún tienen claro que sin el arrojo de Bernardo de Gálvez quizás todo habría sido diferente.